La participación social informada, oportuna, documentada, serena, puede incidir sanamente en las políticas públicas y debe tener un cauce institucional adecuado para que los gobiernos no se alejen y estén siempre acompañados de la ciudadanía, afirmó José Carmelo Zavala Álvarez.
El subsecretario de Desarrollo Sustentable de Baja California destacó que el caso de El Manglito, en Baja California Sur, es un ejemplo de lo vital que es la participación ciudadana para incidir en las políticas públicas.
El funcionario indicó que la participación social es una manera de que la propia comunidad defienda, aproveche y cuide espacios públicos, como parques, áreas verdes y otros recursos naturales, tal como sucedió en El Manglito.
Dijo que la dependencia que representa ha trabajado de cerca con el Consejo Estatal de Protección Ambiental (CEPA) y con la Red Ambiental de Baja California, organismos que han aportado a la toma de decisiones.
“En estos dos años para los que fue electa la actual administración estatal, hemos interactuado no solo con el CEPA, sino con las organizaciones civiles que integran la Red Ambiental de Baja California, quienes nos han ayudado a reflexionar sobre los temas y a tomar mejores decisiones”, comentó.
En coordinación con el Centro de Innovación y Gestión Ambiental han desarrollado casi 40 sesiones que se transmiten en las redes sociales de la Secretaría de Economía Sustentable y Turismo y del CIGA en las que los expertos expositores han coincidido en que la participación ciudadana es clave.
Una de esas sesiones fue la del 23 de septiembre, en la que el expositor invitado fue Alejandro Robles González, presidente de NOS Noroeste Sustentable AC, quien expuso el caso de El Manglito, un barrio que se ubica en la zona norte de La Paz.
Ahí, Robles González comentó que los pescadores de esa zona depredaban la ensenada de La Paz con prácticas ilegales, hasta que la comunidad se dio cuenta de que se estaba destruyendo a sí misma y se organizó a través de campañas, banderas y otras acciones.
“Fueron al rescate de sus recursos naturales, los defendieron con determinación y hoy tienen el capital social necesario para conservar ese capital natural. Cuando hay esa estructura, ese tejido social fuerte, puede venir el aprovechamiento económico sustentable, rentable, de sus recursos naturales”, explicó Zavala Álvarez.
El funcionario indicó que en Baja California existe desde inicios de los años 90 el Consejo Estatal de Protección Ambiental, que empezó con una estructura ciudadana mayoritaria, pero la administración del exgobernador Eugenio Elorduy pensó que no era posible la gobernanza con más votos ciudadanos que de gobierno y los redujo.
Sin embargo, consideró que valdría la pena aumentar más las sillas ciudadanas en este organismo.
Fuente: Uniradio Informa